De mañana,cuando la luz del sol despierte el día,
abre tus ojos con mirada nueva y... sensitiva,
en medio del espeso torbellino que te agita,
rememora en silencio el día a día.
Podrás mirar al cielo con tu ventana abierta,
rosar con tus pupilas el brillo ineludible que te ciega
y apoyando tu rostro entre tus manos,
ausentar los murmullos que te agitan..
Llegarán hasta ti palabras nuevas,
voces inagotables que te harán compañía mientras sueñas,
palabras elementales indefensas,
tormentas que se acerquen a tu puerta.
Atiende entonces el llamado del alma
deslisate en sigilo hacia esa puerta
y entreabre los ojos que infinitos
mirarán a la vida que te espera.
Avanza confiada y plena en la certeza
de que tras esa puerta alguien te espera,
temeroso,distante, inadvertido,
ajeno a la desgracia y al olvido.
No eternices la espera fatigando tu alma,
no detengas los pasos que te han hecho infinita,
no atormentes tu alma albergando la pena
ni te ausentes tan lejos si la vida está cerca.
Permanece presente,sosegada ,serena,
confiando en el presente que completa la escena,
y antes de refugiarte en la noche callada
escucha el silencioso cascabel que desvela..
¿ Dónde está el sol,por dónde están sus rayos?,
¿Por qué lugar se filtran las espinas?,
quizás de lejos,mirando el horizonte
pueda estar la respuesta a tanta herida.
Si me miro las manos ,si me nombro,
si permanezco en mi mirando el día,
abro mi pensamiento hacia el reencuentro
de tu mirada ansiosa y de la mía.
Esta vez me refugio desde adentro,
protegida por muros y masilla mientras,...
sigo mirando ajena el horizonte,
sentada aquí a la sombra,casi ida.
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