martes, 2 de febrero de 2010

TAN CERCA ,...PERO TAN LEJOS


Aveces te me presentas
tan cerca pero tan lejos,
tan cerca como mi sombra ,
tan lejos como tu cuerpo...
y es entonces cuando grito,
cuando llegan a mi mente
torbellinos nauseabundos 
de la peste que me envuelve
y entonces te veo lejos,
ausente entre mi presente,
con la quietud de los tiempos
depositada en tu mente.
A veces te veo ausente,
ausente entre mi presente,
navegando entre los mares 
donde yo no puedo verte
y es entonces cuando estallo,
cuando el rubor me consume
devorando mis racimos 
en gajos enmascarados.
Se me levantan las manos,
se me recogen las venas
se me comprimen los labios 
con los dientes apretados 
y cada luz que me llega,
y cada estrecho cortado
me va ahogando el silencio
con gritos desconcertados.
Tan cerca ...pero tan lejos...
quién diría hace unos años
que dejaría de amarle,...
que el estupor de la lucha
me asombraría en la noche,
y  cabalgando mi suerte
me llevaría a otros mares,
pero aquí estoy en presente,
tan cerca pero distante,
alimentando la brisa 
que me llega de tu calle.


SI HA DE HABITAR EL OLVIDO


Presiento que voy llegando
al final de mi camino,
Presiento que en tantas noches
que mis ojos se cerraron,
mi corazón fue dejando
sus latidos enredados
y que al despertar cansada
en medio de un cielo plano,
mi alma quiso quedarse
con los sueños desvelados.
Presiento que ya no puedo
anteponer la esperanza,
presiento que aunque el silencio
suavice un poco la escarcha
no podré reconocerte,
como amiga,como amada,
Presiento porque estoy triste,
porque mi alma acongojada 
quiere dormirse en cemento
retratada ante la almohada.
Y al final de tanto sueño
presiento que he de callarme,
porque el olvido sereno
se hará dueño del instante,
y aunque me digas ahora
que jamás haz de olvidarme...
ha de habitar el olvido
ruidoso entre tanta calle.
Si ha de habitar el olvido
presiento que ha de quedarse,
que aunque el sol derrita el hielo
y te asomes a mi calle,
tu olvido será primero
y siempre sin titubeos,
como siempre tu lo sabes,
te irás por dónde viniste
a habitar en otra calle.
Presiento que ya me olvidas,
Presiento que he de marcharme.