martes, 26 de enero de 2010

MADERA,TRONCO Y ASTILLAS



La puerta,añosa y desgastada por los interminables vaivenes de la vida,ha comenzado a cerrarse lentamente.Los suspiros retrasados luchan por penetrar y se deslizan adelgazando la consistencia de sus culpas mientras, los lamentos,presentes en todas las páginas que he escrito, no quieren liberarme de sus dichos.Mi alma ha sido su refugio y en ella han anidado esperanzas inagotables de futuro por tiempo indefinido.Hoy se han agotado los pensamientos,hoy las hojas crecidas en medio de mis uñas me hacen aparecer cuál árbol nuevo y es mi tronco calloso y agrietado el madero concreto de mi tiempo.Madera ajada por la furia del viento,ganchos desencajados  que se quedaron quietos para no despertar más sufrimientos,ramajes verdes que crecieron luego y que albergaron frutos que nacieron.Ya todo está debilitado y triste fuera de mi cuerpo,las raíces han absorbido el agua de los pozos desiertos pero en sus bordes unas débiles ramas han crecido.Primero aparecieron como el sustento de las horas vividas pero el paso del tiempo les doblegó como cimiento inútil que moría.Con la madera que aún queda de mi tronco abatido por el tiempo he creado una puerta fuerte y fría,una puerta tan sólida y tan densa que habrá de clausurarse con los días.Estoy dejando entrar algunos pensamientos,unos pocos recuerdos y unos sueños ligeros;un liviano equipaje   para llevarme lejos,...tan lejos como pueda llevarme el pensamiento.